ALEGRIA E INTEGRACIÓN SE VIVIÓ EN LA FERIA DE LA ANTIOQUEÑIDAD
Con la participación de 976 aprendices, se dio inicio a celebración del Día de la Antioqueñidad en el CDHC. El equipo de trabajo de Bienestar al Aprendiz organizó esta importante actividad para aprendices que reciben su formación en el Centro, en los municipios y en los diferentes barrios de la ciudad.
Desde el mes de junio psicólogos, practicantes de psicología y aprendices líderes de cada grupo, prepararon lo que sería un día de integración y de alegría paisa. Desde las 7 de la mañana del 31 de agosto, se decoraron toldos, se preparó la comida y se lucieron los trajes típicos de cada municipio. 
Además de disfrutar de una actividad cultural, se hizo un concurso para motivar la buena asistencia. Cada grupo tenía asignado un municipio el cual lo debía representar con la decoración, la realización de una comparsa, la gastronomía, la cultura y el trabajo en equipo. Todos estos factores fueron evaluados por un jurado responsable de dar un ganador. La comunidad SENA también disfrutó de desfiles, música, poesía, chirimías, bandas musicales y hasta una chiva. 
“El comportamiento tan excelente de todos los aprendices y el compartir entre ellos, fue una muestra del bienestar y el sentido de pertenencia que tienen nuestros jóvenes en el Centro” dice Félix Rúa Hoyos, Coordinador Bienestar al Aprendiz.
Con la participación de 976 aprendices, se dio inicio a celebración del Día de la Antioqueñidad en el CDHC. El equipo de trabajo de Bienestar al Aprendiz organizó esta importante actividad para aprendices que reciben su formación en el Centro, en los municipios y en los diferentes barrios de la ciudad.
Desde el mes de junio psicólogos, practicantes de psicología y aprendices líderes de cada grupo, prepararon lo que sería un día de integración y de alegría paisa. Desde las 7 de la mañana del 31 de agosto, se decoraron toldos, se preparó la comida y se lucieron los trajes típicos de cada municipio. 
Además de disfrutar de una actividad cultural, se hizo un concurso para motivar la buena asistencia. Cada grupo tenía asignado un municipio el cual lo debía representar con la decoración, la realización de una comparsa, la gastronomía, la cultura y el trabajo en equipo. Todos estos factores fueron evaluados por un jurado responsable de dar un ganador. La comunidad SENA también disfrutó de desfiles, música, poesía, chirimías, bandas musicales y hasta una chiva. 
“El comportamiento tan excelente de todos los aprendices y el compartir entre ellos, fue una muestra del bienestar y el sentido de pertenencia que tienen nuestros jóvenes en el Centro” dice Félix Rúa Hoyos, Coordinador Bienestar al Aprendiz. 